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El Terrorismo Escolar

07/11/2022

En qué se diferencia el acoso virtual del acoso/hostigamiento?

Son muy parecidos, sin embargo, existen algunas diferencias:

Cuándo y dónde: El acoso cara a cara suele ocurrir durante el día, por ejemplo en la escuela. El acoso cibernético puede ocurrir en cualquier lugar, cualquier día de la semana y a cualquier hora.

No se necesitan nombres: Si bien no es habitual el acoso anónimo, ni en persona ni en línea, el acoso virtual puede ocurrir sin que se sepa quién envía los mensajes.

Se corre la voz: Las publicaciones maliciosas o vergonzosas en las redes sociales pueden propagarse rápidamente en línea y volverse “virales”. Eso puede aumentar el daño la vergüenza de una experiencia de acoso.

El ciberacoso afecta la dignidad de sus víctimas de una manera sorprendentemente pública, de modo que otras personas pueden contribuir a la ridiculización y respaldarla al aprobar el contenido abusivo, responder a él o compartirlo.

Entre los efectos dañinos del acoso virtual incluyen:                            Dificultades académicas: Los niños acosados tal vez eviten ir a la escuela, tengan problemas para concentrarse en clase o incluso abandonen la escuela.

Salud física y mental: El acoso aumenta el riesgo de depresión, ansiedad y problemas para dormir. Los estudios muestran que, además, podría ponerlos en mayor riesgo de consumo de sustancias más adelante en sus vidas.

Lo grave es que, en el caso de Panamá, no hay regulación legal per se y por eso todo es muy ambiguo. Para el señor Smoly detrás de un niño o joven agresor hay dos clases de padres: los que enseñan valores y los que no lo enseñan. Los hijos son el reflejo de lo que están viviendo en sus hogares y hay una carencia grave de valores éticos y morales en nuestra sociedad.

Actualmente en cada colegio público hay un mínimo de dos (2) niños a punto de suicidarse y si en Panamá contamos con 3,000 colegios públicos quiere decir que tenemos 6,000 niños en peligro en este momento. Y sin contar con los casos de los que no nos enteramos.

Como dice el señor Smoly “estamos en deuda con los niños”. Urge hacer algo, detener desde todos los ángulos este terrorismo escolar.

Mientras tanto Apoye a su hijo dígale que, si está siendo víctima de acoso escolar, NO SE QUEDE CALLADO, el del problema no es él, es el otro niño. Los estudios demuestran que contar con tan sólo una persona que los escuche y apoye ayuda mucho a los niños que sufrieron acoso a manejar la situación.

Documentación: Si hay evidencia en línea, guarde una captura de pantalla. Esto podría serle útil si fuera necesario denunciar el hecho.

Denuncia: La mayoría de las plataformas de redes sociales tienen un proceso para denunciar la mala conducta. Si un compañero de clase está acosando a su hijo, puede denunciarlo en la escuela. Si el acoso involucra amenazas de daño físico, puede considerar la posibilidad de denunciarlo a la policía.

Busque usted también un apoyo: La experiencia de acoso de un niño también puede ser estresante para los padres. Es conveniente que los padres consideren la posibilidad de buscar a alguien con quien hablar que les brinde apoyo.

Busque recursos: Hable con su pediatra acerca de los recursos para lidiar con el acoso. Pero sobre todo enséñele a su niño a creer en él, fortalezca su autoestima y explíquele la grandeza que hay en él como ser humano e hijo de Dios que es. Igual también cuenta con mi apoyo y escríbame al gonzalezjiesselinde@gmail.com